En medio de su proceso como mamá primeriza, Epa Colombia contó si bautizará a su hija y muchas personas no compartieron su idea.

Epa Colombia, conocida por su franqueza en las redes sociales, compartió con sus seguidores su decisión de no bautizar a su hija, desencadenando un debate sobre la crianza y la religión. Aunque ella misma es creyente, explicó que tiene razones personales para optar por no realizar este acto religioso. Esta afirmación no fue solo una declaración de su postura, sino también una crítica sutil a quienes cuestionan sus decisiones como madre.
Epa Colombia contó su decisión sobre el bautizo de la hija
La empresaria ha sido transparente sobre los altibajos de su viaje hacia la maternidad, desde los momentos felices hasta los desafíos emocionales y físicos. Compartió abiertamente sus experiencias, incluyendo los síntomas del embarazo, sustos por la salud de su bebé y sus luchas con la depresión posparto, lo que generó empatía entre sus seguidores y un flujo constante de preguntas sobre su enfoque en la crianza.
Ante la sugerencia de un seguidor sobre la colocación de la silla del automóvil de su hija, Epa Colombia, quien gastará una fortuna en sus cirugías, respondió con firmeza, reafirmando su autoridad como madre y defendiendo su derecho a tomar decisiones sobre la seguridad y el cuidado de su hija.
Su respuesta, aunque directa, refleja la realidad de muchas madres que se enfrentan a la presión y el escrutinio público en las redes sociales. Epa Colombia aboga por el respeto a la autonomía de las madres en la toma de decisiones sobre la crianza de sus hijos, reafirmando que, al final del día, son ellas quienes mejor conocen las necesidades y el bienestar de sus hijos.
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