Actitudes que matan el amor… ¡Y lo dejan bien muerto!

Cuando alguno de los integrantes de la pareja tiene estas actitudes que matan el amor, de nada sirven los regalos, las reconciliaciones ni las cartas de amor.

Dicen que las relaciones de pareja hay que cuidarlas como un jardín, podando la maleza y regando con esmero los brotes… Pero hay peligros que atacan, y a veces somos nosotros mismos quienes los causamos.

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Alejandro Estrada, sin pelos en lengua, le respondió a Nataly Umaña tras sus comentarios

Según una investigación realizada por el psicólogo John Gottman en la Universidad de Washington (Seattle), existen cuatro actitudes crónicas que acaban con las relaciones amorosas.

Evita estas actitudes que matan el amor

Criticadera

A veces no nos damos cuenta que nos convertimos en versiones horrorosas de la madrastra malvada de Blancanieves, criticando absolutamente todo lo que nuestra pareja hace o deja de hacer.

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Cuando tu pareja haga algo que ya no soportas, comunícaselo como lo harías en tu lugar de trabajo, en donde la regla es no tomarse nunca nada personal. Pero con amor.

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Desprecio

Cuando no valoras lo que tu pareja hace y le restas importancia a sus logros personales que no tengan que ver contigo, estás abriendo una grieta entre los dos, la cual se agrandará cada vez más.

Para no caer en esta actitud, los miembros de la pareja deben evitar a toda costa el sarcasmo, así nos creamos muy inteligentes y graciosos al recurrir a él. Que tus mensajes vayan siempre con respeto y amor.

Contraataque

Contraatacar es una de las respuestas instintivas que tenemos todos los animales ante una agresión externa (la otra es la huida, el siguiente punto). pero no es la más civilizada.

En la naturaleza está muy bien, pero en la vida familiar debemos hacer lo de las escrituras: poner la otra mejilla. Recuerda que para pelear se necesitan dos.

Huir

Las chicas somos expertas en salir corriendo y dejarlo todo tirado en medio de un problema de pareja, pero ellos no se quedan atrás; aunque no se vayan, se cierran y construyen un muro de silencio a su alrededor.

Esta actitud es muy peligrosa, porque es la que genera el rompimiento o incluso violencia doméstica. Para combatir esto se debe acudir a terapia de pareja.

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Con información de Prevention