Dicen que lo prometido es deuda, sin embargo, en el amor y en el sexo, no todo lo que se promete se cumple.

A todas nos ha pasado alguna vez. Prometemos pasar un rato sexualmente agradable, ya sea con nuestra pareja o amigo con derechos, y luego no cumplimos “la promesa”, ¿por qué? En Vibra, expertos en el pensamiento femenino, se nos ocurren algunas razones… ¡Aunque podrías no estar de acuerdo con muchas de ellas! Échales un vistazo!
Las mujeres preferimos aplazar “la promesa” porque…
Nos llega el periodo, y a veces sencillamente no tenemos ganas de decírselo a nadie, ni a nuestra pareja…

No nos depilamos y no tenemos oportunidad de hacerlo en el momento de llevar a cabo “la promesa”…
Hicimos “la promesa” con unos traguitos en la cabeza, pero al pasarse la borrachera al príncipe azul se le ha ido el color…

Simplemente estamos agotadas. No es que no queramos, es que preferimos dormir…

Nos enteramos de algo sospechoso y no podemos cumplir “la promesa” hasta aclararlo…

Y una vez aclarado el chisme, aún sentimos desconfianza, por lo que la respuesta sigue siendo “no”

Tenemos algo que nos avergüenza, como un forúnculo, un barro mal ubicado, una irritación, etc…

Muchas veces lo que ocurre es que estamos mal del estómago y no se lo diremos a nadie, ¡ni aunque nos torturen!

Sospechamos que nuestra pareja nos miente o nos oculta algo…

De repente recordamos algo horrible que nuestra pareja nos hizo o nos dijo hace mucho tiempo…

Sentimos que solo nos quieren para “eso”…

Aunque suene a disculpa, a veces solo nos duele la cabeza… ¡En serio!

Otras veces no queremos cumplir “la promesa” y punto, ¡no tenemos por qué dar ninguna razón ni disculpa!
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¿Por qué otras razones aplazas “la promesa” de amor? Escríbenos lo que piensas en los comentarios de esta nota.