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¿Por qué mi perro se come el popó? Presta atención
Si te has cuestionado sobre “por qué mi perro se come el popó“, te revelamos las posibles causas y cómo debes actuar en esos momentos.
Si tienes un perro te habrás dado cuenta de que su crianza y cuidado no es fácil, pero muy necesaria. En ocasiones presentan algunos signos que pueden generar inquietud. Por ejemplo, hay muchos dueños que quieren saber por qué les da hipo a los perros, algo que es completamente normal y generalmente se produce por la ingesta muy rápida de comida o bebida.
Para evitar problemas siempre es necesario tener conocimientos sobre su salud y aseo. Puedes aprender cómo limpiar las orejas de un perro fácil y en casa para evitarle una infección dolorosa. Pero si el problema es por la ingesta de las heces, te contamos todo lo que debes saber sobre este incómodo comportamiento.
Por qué mi perro se come el popó
A esta conducta se le conoce como coprofagia y sucede cuando el perro come su propio excremento o el de otros animales. No se ha logrado determinar precisamente cuál es la causa para que esto suceda. Sin embargo, hay algunos escenarios que son los que comúnmente explica este problema.
- Gusto: Puede ser que simplemente le guste el sabor. Estos animales se expresan por la boca y les gustan las cosas que tienen un olor fuerte.
- Limpieza: Esta causa puede provenir de la madre, pues su instinto las lleva a comer las heces para mantener el entorno limpio. Por ende, el cachorro puede haber aprendido esto por observación.
- Dieta: Aunque ha sido muy discutida, también es una hipótesis. Se cree que la coprofagia se debe a la ausencia de algo necesario en la dieta. También se cree que puede ser producto de trastornos médicos raros, así que para salir de dudas es mejor consultar al veterinario.
¿Cómo prevenir que un perro coma su popó?
Puedes consultar con un profesional sobre el actuar del canino, pues él te orientará de manera personalizada. Además, ten en cuenta estos consejos para prevenir que tu perro desarrolle esta conducta o para intentar eliminarla en caso de que se esté presentando.
- Si ignora sus heces, recompénsalo con un alimento que le guste
- Ofrécele variedad de juguetes para que mantenga su boca ocupada y siempre pueda masticar algo
- Aliméntalo más veces para que no tenga hambre. No es darle más comida, sino más porciones en menores cantidades
- Busca un aditivo para su comida, el cual sea agradable de comer, pero que al digerirse se haga amargo.
Aunque no está comprobado que funcione, muchos dueños aseguran que poner pequeños trozos en su comida es la solución. Esto produce que las heces tengan un sabor amargo o ácido, por lo que evita comerla. Puedes probar con el calabacín de la misma forma, ya que se cree tendría el mismo efecto. Es importante que recojas su excremento inmediatamente y vigiles que no coma los de otros animales cuando es hora de pasear. 
¿Tu perro ha comido su popó? Deja tu respuesta en los comentarios de esta nota y, ¡no olvides compartirla en tus redes sociales!
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